miércoles, 6 de mayo de 2015

Las peñas de Jilotepec, estado de México

Una vieja leyenda cuenta que las Peñas de Jilotepec eran en la antigüedad un pueblo al que los dioses habían dotado de toda clase de privilegios:mucha agua, comida, trabajo y diversiones; sin embargo, la gente vivía tan plenamente que comenzó a abusar de la naturaleza, cometió toda clase de excesos y desvaríos, tal como las antiguas ciudades de Sodoma y Gomorra, por lo que los dioses quisieron darle un castigo para que las generaciones futuras aprendieran a valorar lo que la naturaleza y la vida les otorga. Así que decidieron encantar la ciudad convirtiéndolos en piedra.
Años después, en las faldas de esos cerros se erigió un pueblo, cuyos habitantes convencidos de la veracidad de la leyenda, quisieron hacer un rito para desencantar el lugar. Los más ancianos estaban convencidos que siguiendo al pie de la letra un hechizo, desencantarían al antiguo Pueblo de las Peñas. Así que se reunieron todos en torno a la fuente, la cual todavía se puede ver, y ahí tomó la palabra el más viejo de los habitantes diciendo: Estamos aquí para pedir su ayuda y desencantar el antiguo Pueblo de las Peñas. ¿Qué debemos hacer?

Según se cuenta, acto habían visto, al tiempo que una voz como de ultratumba les decía:
El más puro y honesto del pueblo debe de llevar en sus espaldas a esta mujer hasta la capilla de su pueblo, pero nunca, por nada del mundo debe voltear a verla, por más curiosidad, o invitaciones que reciba de ella, no deberá voltear ni mucho menos mirarlas.
Un joven, al que todos en el pueblo apreciaban, dijo: Yo la llevaré, yo puedo hacer ese encargo y tendré cuidado en cumplir mi misión.
El joven, entusiasmado también por la belleza de la mujer, la tomó sobre sus espaldas y comenzó a caminar por el sendero rumbo a la capilla del pueblo. Sin embargo, conforme avanzaba, la carga empezó a hacerse más pesada. Cada vez que daba un nuevo paso, parecía que aumentaba el peso de la mujer y su misión se complicaba a cada momento sus piernas le respondían menos.
Muerto de curiosidad por saber qué era lo que tanto lo pensaba, voltéo hacia la mujer, olvidando lo que le habían dicho y se dio cuenta que su pesada carga era una enorme serpiente que conforme él avanzaba ésta crecía. Justo en el instante en el que el joven cruzó su mirada con la serpiente, todos los que habían subido a ver el momento en que se desencantaría el pueblito de Las Peñas quedaron convertidos en piedra, incluidos la serpiente y su cargador.
A partir de esa fecha, nadie volvió a intentar desencantar al viejo pueblo de Las Peñas. Las personas que habitan en Dexcaní cuentan que cada 3 de mayo, durante la noche, Las Peñas recobran vida y que se alcanzan a escuchar los gritos de niños jugando. Si por alguna razón hay una corriente de agua cayendo, ya sea de una llave o una fuente, se puede escuchar entre lo líquido vital las voces y palabras de personas que en otro tiempo de vida.
La comunidad de Dexcaní Alto se encuentra en una pequeña cadena montañosa al sureste de Jilotepec, con la mayor reserva de bosques de encinas en el Estado de México.
Árboles y peñas de formas singulares conforman un lugar de armonía para la meditación. Al caminar por cuestas y bajadas, se siente la energía de este místico lugar, donde los árboles y los arbustos todo el año permanecen verdes alegrando el paisaje.
Este lugar es propicio para escalar más de 40 rutas y es visitada por expertos de México y otros países, así como para la práctica de bicicleta de montaña y caminatas. Algunas de las actividades para realizar en Las Peñas son montar a caballo y respirar la pureza del aire, así como rentar cabañas o campamentos con asadores.
En los meses de lluvias, los riachuelos abundan nutriendo la flora y en consecuencia beneficiando a su fauna. Además, en la cúspide de Las Peñas anidan aves de muchas variedades como las águilas. De manera que la leyenda es un buen pretexto para visitar este encantador pueblo, donde lo que sobrará son motivos para salir a la aventura.

Otras publicaciones:

sábado, 25 de abril de 2015

Videos del terremoto de hoy en Nepal

Una grabación de cámara de seguridad muestra el devastador terremoto de magnitud 7,9 que sacudió a Nepal esta mañana. El video muestra el momento en que el sismo se percibe en una casa ubicada en la cima de la colina Ichangu Narayan en la capital nepalí de Katmandú.

 Daños despues del terremoto:

martes, 3 de febrero de 2015

El Pulque y su historia.

El pulque es una bebida alcohólica fermentada tradicional de México, cuyo origen es prehispánico y se elabora a partir de la fermentación del mucílago- popularmente conocido en México como aguamiel-, del agave o maguey especialmente del maguey pulquero (Agave salmiana) o del Agave atrovirens; en el lengua otomí se le conoce como ñogi y en la lengua purhépecha, como urapi.

Fue representado en relieves tallados en piedra por los indígenas mexicanos desde el año 200 D.C., pero se desconoce su origen, el cual se pierde entre leyendas y mitos prehispánicos. La más conocida de todas ésas tradiciones tiene su origen en la cultura tolteca, durante el gobierno de Tecpancaltzin,la cual dice que en 1340 un noble llamado Papantzin descubrió, gracias a un ratón ebrio, los métodos para extraer el aguamiel y luego obtener el pulque, motivo de la caída de Ce-Acatl-Topiltzin Quetzalcóatl, quien tuvo que abandonar Tula.
Una leyenda indica que el tlacuache se lo regaló a los hombres; otra lo menciona como un regalo de la diosa náhuatl Mayáhuel, quien enseñó a una joven noble de nombre Xóchitl a elaborarlo. Gracias a ese regalo su padre, el cual se encontraba molesto por que el enamorado de su hija era un campesino de nombre Tecpalcatzin, dejó que el amor de su hija prosperase; ésta leyenda tiene otra variante donde Papantzin y Xóchitl son padre e hija y ellos lo descubren, posteriormente llevan el pulque como regalo al tlatoani Tecpancaltzin, quien se enamora de Xóchitl y la embaraza.
Entre los indígenas mexicanos, los mexicas tenían las reglas más estrictas para el consumo del pulque, el cual estaba estrictamente prohibido para los menores de sesenta años y que no hubieran cumplido los deberes con su pueblo (por ejemplo, si un joven era encontrado ebrio o tomándolo la primera vez se le rapaba la cabeza como castigo, en la segunda ocasión era castigado con la muerte por medio de golpes o asfixia), mientras que a los ancianos se les permitía embriagarse durante las fiestas dentro de su casa; si alguien lo hacía en público y constantemente, se les castigaba con la destrucción de su casa, entre otras sanciones.

Fuente de información: Wikipedia

Otras publicaciones:

miércoles, 21 de enero de 2015

Disponible la version WhatsApp Web

WhatsApp Web esta disponible permitiendo a sus usuarios acceder a sus conversaciones desde el navegador en cualquier dispositivo.

Para acceder solicita el escaneo del codigo QR con tu celular, el codigo se actualiza constantemente en la pagina oficial https://web.whatsapp.com/

Funciona en Google Chrome.

viernes, 14 de noviembre de 2014

Centro Ceremonial Otomí

Escápate al Centro Ceremonial Otomí, lugar asentado en una región boscosa, en las faldas del cerro de Las Navajas y que recrea el antiguo punto de reunión de esta enigmática cultura, en el municipio de ‪Temoaya‬. Conoce sus plazas, paseos, andadores, glorietas, columnas y conos, los cuales resumen su pensamiento religioso.
 

martes, 14 de octubre de 2014

Poesía a la portada Mazahua en Ixtlahuaca de Rayon

Foto: Yo Carlito
Allá por el rumbo de la cabecera, se oye los pedreros y la cohetería, viene la portada alegre y señera y brinca de gusto la chiquillería.

Palmotea la gente, cuando de repente un petardo truena, y suena muy fuerte el viejo tambor, y entre muchos cantos y piadosos rezos, el cempaxúchitl esparce su olor.

Francisco de Asís, seráfico padre quien amaba tanto a los animales, viene entre llantos y flores y cables. Un hombre maduro de brillantes lentes, sombrero en mano azuza a la gente, sus gritos se acatan, parecieran leyes ¿se recuerdan del?, era Pancho Reyes.

Están en el atrio, se oye mil cohetones y cantos y sones de los teponascles, suenan los concheros y las mandolinas y se escucha el canto de los caracoles.

Todos mandan y gritan con brío, la hermosa portada va tomando altura sube, sube, sube entre el gran gentío. La portada queda con su grey amada, ahí ha de quedarse por gran gentío. La portada queda con su grey amada, ahí ha de quedarse por gran temporada, el orgullo nuestro, nuestra gran portada" (Sánchez Gómez, 1998.)